Fernando Vázquez Rigada
A las entradas del infierno, Dante imaginó un letrero que era, en realidad, una profecía:
-Dejad aquí toda esperanza.
La decisión del gobierno federal de cancelar los éxamenes magisteriales cancela no solo la reforma educativa. Cancela el futuro nacional.
La evaluación es un engranaje central para garantizar la calidad educativa en el país. Sin evaluación, seguiremos anclados a la dictadura cruel y despiadada de la mediocridad. También al peor de los subdesarrollos: el mental.
Negar a un niño la posibilidad de tener un buen maestro es condenarlo a la imposibilidad de desarrollar su talento, de ensanchar su mirada al mundo, de generar una conciencia crítica. De triunfar en un mundo que no conoce la piedad.
Se les impide, en suma, la posibilidad de cumplir sus sueños.
En un escueto, penoso comunicado, la Secretaría de Educación Pública informó que se suspendía indefinidamente la evaluación de los procesos de evaluación de maestros para la permanencia, promoción e ingreso al sistema educativo.
Eso implica, en los hechos, enterrar la reforma educativa.
Evaluar maestros no implica deshacerse de ellos. Implica asegurar que sólo los mejores tendrán en sus manos el futuro nacional. Que su eficiencia debe ser medida, como es medida la eficiencia de todos los demás mexicanos que cada día debemos probar, de una u otra forma, nuestras competencias.
Todo el crédito reformista de la administración queda ahora en duda. Tiraron a la basura la reforma educativa. La Ronda uno de la energética se limitó a producción en aguas someras, en donde PEMEX tiene capacidades de producción. La reforma financiera apenas ha logrado incrementar el flujo de crédito, y no a MPYMES. La reforma fiscal paró a la economía y no logró frenar el endeudamiento público.
Los efectos de ceder al chantaje de la CNTE traerán desprestigio global al gobierno. Se dobla ante la presión de un grupo que amenazaba con prohibir las elecciones, que implicaba cancelar la constitución.
Lo lograron de cualquier forma. Toda la reforma constitucional es letra muerta. La CNTE cerró, en los hechos, la constitución.
Peor: se cierran las puertas del futuro nacional.
En un mundo regido por el conocimiento, la innovación y la creatividad. Interconectado. Hiperveloz, carecer de habilidades es carecer de un provenir.
Ni hablar. Dejad aquí, hoy, la esperanza. México no cambiará. Ganó la CNTE.
@fvazquezrig